domingo, 15 de noviembre de 2009

Cuentos Ignorantes


A continuación dos cuentos orientales sobre la ignorancia.

Ignorancia. Nº 1.

Después de haber saqueado una ciudad, un hombre estaba tratando de vender una valiosa alfombra, parte del botín:

“¿Quién me da cien piezas de oro por esta alfombra?”, gritaba el hombre por las calles del pueblo.

Habiendo realizado la venta, se le aproximó al vendedor un compinche del saqueo y le preguntó:

“¿Porqué no pediste más por esa incalculable alfombra?”

El individuo le respondió:

“¿Pero es que existe un número mayor que cien?”

Y colorin Colorado....


Ignorancia. Nº 2.

Una comunidad, pidió a un sabio que les impartiese enseñanza en forma de discursos, ya que no concebían otra forma de aprendizaje. Después de mucho insistir, éste accedió.

Dirigiéndose a la asamblea, preguntó:

“¿Saben de que voy a hablar en el discurso de hoy?”

No -Contestaron todos al unísono-

“Pues, si no saben siquiera de lo que voy a hablarles, ¿cómo van a aprender nada? -dijo el sabio antes de marcharse-

Los miembros de la comunidad volvieron a buscarlo.

El sabio preguntó de nuevo a la asamblea cuando regresó:

“¿Saben hoy de que les hablaré?”

Sí -Contestaron ésta vez habiéndose puesto previamente de acuerdo-

“Pues si ya saben de que voy a hablar, no me necesitan” replicó el maestro, y volvió a marcharse.

Nuevamente lo convencieron los miembros de la comunidad para que hablase, esta vez concluyeron que lo mejor sería contestar unos, que sí sabían de lo que hablaría y otras que no, en caso de que volviese a preguntar.

En efecto, reunidos todos esperando el discurso del sabio, éste preguntó:

“¿Y hoy saben de que les hablaré?”

“Unos sí lo sabemos y otros no” -respondieron-

“En este caso” -dijo el maestro-, “que los que saben instruyan a los que no lo saben”.

Dicho lo cual, se marchó y no regresó más. Y Colorin Colorado...

LA OTRA CARA DE LOS CUENTOS INFANTILES. Estrella Cardona Gamio

1 comentario:

  1. La verdad yo también he creído que algunos clásicos son “patéticamente” horripilantes, atentan contra las buenas costumbres, en fin … Sin embargo este par de cuentos cortos sobre la ignorancia, caben en el genero de cuentos “pensantes” o qué?

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